PROBLEMÁTICA ACTUAL
Actualmente,
la mayoría de las granjas de pieles se encuentran en Europa; en donde se
produce el 70% de la piel de visón, y el 63% de la piel de zorro; siendo los
países mayormente productores y exportadores Dinamarca y Finlandia. Rusia y los
Estados del Báltico producen el 11% de la producción de piel de zorro; mientras
que China acapara el 27%, perfilándose como una potencia emergente en la
producción y exportación de pieles. Por su parte, América del Norte produce el
11% de la producción mundial de pieles; siendo Estados Unidos, el mayor
exportador, seguido por Canadá. Las casas de subasta de pieles más importantes
se localizan en Copenhague (Dinamarca), Helsinki (Suecia), Oslo (Noruega), San
Petersburgo (Rusia), Seattle (EU) y Toronto (Canadá).
Por
otro lado, la manufactura y procesado de las pieles, se lleva a cabo en países
en desarrollo como India, China, Turquía o Bangladesh. Donde las normas y
regulaciones sobre bienestar animal son aún más insignificantes que en los
países del primer mundo.
Si
bien en los últimos años, la industria peletera ha decrecido debido a las
restricciones impuestas a la exportación de pieles por algunos países, lo que
ha contribuido a que se genere un déficit de materia prima; las nuevas técnicas
de procesado, la gran cantidad de diseñadores apostando por su uso y el aumento
en la producción por parte de países como China y Rusia, ha encaminado la
industria a la fabricación de productos de mayor calidad, con una mano de obra
barata y a precios muy competitivos de venta.
Los
animales utilizados para este fin, pueden ser criados en granjas o ser
atrapados en su medio natural. Entre los animales criados en granjas para la
industria peletera se encuentran: el visón, la, el zorro, el zorro azul, la
marta, el hurón, el mapache, la nutria, así como el perro y el gato común. Mientras que los animales silvestres cazados
para la industria peletera son: el zorro gris, el zorro rojo, el castor, el
coyote, el ratón almizclero, la ardilla, el armiño y la zarigüeya.
La
situación que viven estos animales en las granjas es deplorable; pues viven en
hacinamiento, en reducidas jaulas, lo que les provoca desequilibrios mentales
reflejados en movimientos repetitivos, convulsiones, y automutilación. Además,
las técnicas de crianza están ideadas para que las hembras tengan el mayor
número de partos antes de ser ejecutadas. Mientras que los machos deben producir
mayor semen, por lo que se les provoca descargas eléctricas en los testículos
para tal fin; produciéndoles descalcificación y desequilibrios electrolíticos. Finalmente,
una vez que el grosor de su piel es lo suficientemente apto para ser comercializada,
se procede a matar a los animales con procedimientos que causen el menor daño
posible a su piel; como sería con una inyección letal, asfixia con gas o
electrocución. En ocasiones los animales aún están vivos cuando comienzan a
desollarlos, teniendo que someterse al
sufrimiento atroz de que ver y sentir como les es arrancada la piel.
Al
hablar de la peletería, automáticamente pensamos en pieles, pero la industria
no se limita a esto, pues también entran en el ámbito, la industria del cuero, que
es la más redituable, así como la utilización de la lana y plumas para la
fabricación de productos textiles y muebles.
El
cuero proviene principalmente de vacas lecheras que ya no son útiles, o bien de
terneros. Estos animales viven cruelmente confinados, desprovistos de espacio,
luz y comida suficientes. Los mataderos en India, son
particularmente crueles, pues las vacas
son obligadas a viajar cientos de kilómetros desde los estados hinduistas hasta
los estados islámicos donde serán matadas, en dicho viaje se las tortura de
todas las formas posibles para obligarlas a caminar.
En
el caso de las plumas, estas se obtienen principalmente de gansos y patos; los
cuales son criados en iguales condiciones de hacinamiento. Son desplumados 4 o
5 veces durante su vida; tras lo cual se les mata para obtener provecho de su
carne. De acuerdo con una investigación llevada a cabo por Beauty Without
Cruelty Charity en Inglaterra, durante el desplumaje los gansos son levantados
por la espalda y mientras se les arrancan las plumas, entran en estados
frenéticos intentando liberarse, por lo que en el proceso muchos terminan
rompiéndose las patas o muertos.
La
lana es una de las fibras textiles más utilizadas por su elasticidad y
resistencia. De ella se obtienen subproductos como el “tweed” (tejido rústico
de lana), el fieltro, el hilo de lana o el estambre. Para conseguir la lana, las ovejas son
esquiladas (se les corta el pelo) una vez al año; para lo cual son tumbadas y
rasuradas muy cerca de la piel con esquiladoras mecánicas o tijeras. El corte
limpio y rápido genera el “vellón”, que es la lana de una sola pieza.
Alrededor
del 40% de la lana proviene de ovejas merinas y un 43% de variedades cruzadas.
El 17% restante proviene de otros animales como el camello, la alpaca, las
cabras de Angora, Cachemira y Mohair, la vicuña, el yak y el guanaco.
Australia
es el primer productor y exportador de lana, con un 30% de la producción
mundial, seguido por China, Nueva Zelanda y Turquía. En Latinoamérica se
destaca Argentina.
En
Australia se utilizan las ovejas del tipo merino, por su piel y calidad de la
lana. Este tipo de oveja no tolera las altas temperaturas del país, muriendo
deshidratadas en muchos de los casos. Además, la excesiva xantidad de arrugas
provoca mayor sudoración y riesgo de contraer miasis, una infección de la piel
causada por larvas de mosca; por lo que se realiza el denominado “mulesing”,
que consiste en cortar trozos de carne alrededor del ano, para evitar que
parásitos se alojen en el interior del animal y por el contrario depositen sus
larvas en esta zona. Esta operación es realizada sin anestesia y en muchas de
las ocasiones produce la muerte del animal por infección de la propia
mutilación. Sin hablar de su masivo exterminio, cuando su producción disminuye,
fuera del país. Las ovejas son trasladadas en pésimas condiciones a países del
Medio Oriente o Norte de África, para ser sacrificadas bajo otra reglamentación
sanitaria menos estricta y más rentable. Durante el viaje, muchas ovejas enferman, otras quedan sumidas
entre los excrementos y no pueden moverse, o son aplastadas por ovejas que
tratan de alcanzar la poca agua que se les da. La mortalidad a bordo de los
barcos que las transportan es de un 10%. Las ovejas enfermas o malheridas son
procesadas vivas o lanzadas por la borda.
Si
hablamos de otros tipos de lana, hablamos también de la ambición humana, de los
excesos de la producción en masa y de la visión del animal como objeto a
nuestro servicio. Hablamos de la proveniente de los conejos de angora, enjaulados
toda su vida en la semioscuridad en granjas de China, o de cabras de Cachemira
sacrificadas si no cumplen los requisitos de producción a los años de vida. La
mayoría de estas lanas exóticas son producidas en países del Tercer Mundo o ya
la nombrada China, lugares donde no existe ningún tipo de reglamentación acerca
de sus condiciones, alimentación o traslado. Empeorando la situación en muchos
casos con el hecho de que los diferentes gobiernos ofrezcan subvenciones por
cada animal, fomentando su uso y abuso por granjeros no especializados, cuyo
“objetivo de producción” es exclusivamente el recibir tal prestación.
Mucha gente
cree que trasquilar a las ovejas es bueno para ellas, pues de lo contrario
tendrían demasiada lana. Pero, sin intervención humana, las ovejas producen la
suficiente lana para protegerse de las temperaturas extremas, pues ésta les
sirve para aislar tanto el frío como el calor. Las ovejas son trasquiladas
cada primavera, justo antes de que se deshagan naturalmente de sus abrigos de lana.
Para evitar que se pierda la lana, los granjeros han de trasquilar antes de que
haga calor, y como consecuencia de esto muchas ovejas mueren de frío. A los
granjeros se les paga por volumen, no por hora, lo que les obliga a trabajar
rápido y sin atender al bienestar de las ovejas.
La industria peletera,
un afán de lucro basado en el martirio atroz, mueve en nuestro país sumas
ingentes de dinero y cuenta entre sus clientes además de con gran cantidad de
seres anónimos, con numerosos personajes famosos de la industria del
espectáculo y la moda. Y es que la sensibilidad, la riqueza de espíritu, una
ética adecuada, el compromiso con los desprotegidos y la capacidad para sentir
el dolor de los otros, suelen ser aspectos reñidos con la afectación, la
vacuidad interior, la petulancia y el desprecio más absoluto por el
padecimiento ajeno ante los intereses propios. México sigue siendo uno de los
pocos países en donde se juntan varios factores que favorecen la cría de la chinchilla
con un bajo costo de producción. Sin embargo, ya que en otros países como
Argentina y Brasil se producen 10 veces
más pieles que en nuestro país y a los compradores les conviene ir y obtener
mayor número de piezas en un solo viaje, México no figura en el ranking mundial
de productores/exportadores de
pieles en el mundo.